En la presentación de los presupuestos generales del Estado para el próximo año fiscal indio, la ministra de Finanzas, Nirmala Sitharaman, ha hecho pública una serie de medidas destinadas a potenciar la economía digital del país, pero también a limitar la actividad privada en torno a las criptodivisas. Para ello, el Gobierno indio aplicará un impuesto del 30%, el más alto del país, sobre los ingresos procedentes de las criptomonedas y los NFT (token no fungibles).