A primera vista, la reciente subasta de terrenos de la ciudad china de Rizhao parecía rutinaria. Hubo cuatro ofertas, que elevaron el precio un 11% hasta los 170 millones de dólares. Un examen más detallado revela algo curioso: al parecer, las ofertas fueron realizadas por una entidad financiera propiedad del gobierno de Rizhao, lo que significa que la ciudad se vendió los terrenos a sí misma.